BLANCA LLEÓ

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Blanca Lleó es doctora en arquitectura por la Universidad Politécnica de Madrid y catedrática de Proyectos Arquitectónicos en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid (ETSAM). Desde 1985 dirige su propio estudio de arquitectura. Aunque su obra abarca todas las escalas y tipologías, sus proyectos residenciales son especialmente conocidos.

Blanca Lleó Fernández nació en Madrid en 1959. Cursó los estudios de arquitectura y se doctoró en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid (ETSAM). En esta misma institución es profesora desde 1990, obteniendo la plaza de titular seis años más tarde. En la actualidad es catedrática de Proyectos Arquitectónicos y miembro del equipo de dirección de la Escuela como Subdirectora-adjunta a la Dirección para la Movilidad del Profesorado.

En el año 1985, con 28 años, fundó su propio despacho de arquitectura gracias, en parte, a obtener el primer premio en diversos concursos de arquitectura. Uno de sus primeros proyectos fue el Bibliobus (1984-1985) diseñado conjuntamente con Jesús San Vicente y Pedro Urzaiz. Se trata de un autobús-biblioteca promovido por el Ministerio de Cultura para acercar el servicio de préstamo de libros a poblaciones sin biblioteca fija en la Comunidad de Madrid. La propuesta del equipo de Blanca Lleó incluía tanto el diseño del autobús como la imagen corporativa global de esta campaña. El autobús tenía gran parte de su carrocería acristalada de modo que los libros eran visibles desde el exterior. Un total de 15 autobuses con este diseño estuvo funcionando durante 25 años como servicio de biblioteca móvil para los pueblos periféricos de la región de Madrid. El Faro de Nules (1989-1991) es otro proyecto inicial que también fue obtenido gracias a conseguir el primer premio en un concurso de arquitectura; esta vez a escala nacional y promovido por el Ministerio de Obras Públicas. El diseño de Blanca Lleó tiene en cuenta el carácter del lugar: un núcleo costero, habitado fundamentalmente durante los meses de verano y sin edificios históricos que sirvan como referente identitario. En este contexto, se plantea un edificio abierto al público, con un uso ampliado más allá de constituir sólo una señal marítima. Se entiende como un faro-mirador y se añade una pequeña sala de exposiciones. La materialidad de las escaleras y rampas interiores invita a recorrer el gran espacio vertical y ascender hasta un escultórico balcón que cuelga atirantado del fuste de hormigón. El Faro, que sigue en funcionamiento, es también empleado por varias asociaciones locales para el fomento de la protección del litoral que organizan visitas al edificio y promueven la reactivación de su sala de exposiciones.

Estos proyectos de menor escala fueron seguidos de otros más ambiciosos, pero también obtenidos mediante concurso. Una de las pocas obras de paisajismo de Blanca Lleó pertenece a esta época: el Parque de las Salinas en la Bahía de Cádiz (1989-1995). El proyecto, del que es también autor el arquitecto Javier Maroto, resultó vencedor en un concurso nacional de ideas y destaca por su intención de potenciar “el espacio social de la naturaleza”, su capacidad para aglutinar diversos usos, más allá del paisajístico, sin renunciar a la sostenibilidad ambiental. Tras el concurso y la ejecución del proyecto el área fue declarada Parque Natural. El edificio para el Ayuntamiento de Lorca (1989-1994) es el fruto de otra colaboración entre Blanca Lleó y Javier Maroto vencedora de un concurso nacional de ideas. La propuesta es un edificio-puente que conserva las preexistencias del s. XVIII y añade nuevos espacios para uso administrativo e institucional en una arquitectura que resulta dinámica y fluida a base de la continuidad espacial que generan la transparencia del contenedor y la sucesión de huecos y núcleos de comunicación vertical.

La sucesión de primeros puestos en los concursos de arquitectura permitió a Blanca Lleó consolidar su estudio y recibir encargos directos tanto desde la Administración Pública como de clientes privados. Uno de los primeros de mayor importancia fue el Centro Penitenciario de Jaén (1985-1991), donde el equipo dirigido por la arquitecta y compuesto por los arquitectos Jesús San Vicente y Juan Ignacio Mera se debía enfrentar al reto de diseñar el prototipo para las cárceles españolas de la recién estrenada democracia. La propuesta es una solución modular, contraria al modelo panóptico decimonónico, y adaptada al nuevo marco legal. Se apuesta por la prefabricación, la luz natural y la integración de servicios tales como biblioteca, aulas de formación, patios e instalaciones deportivas. Sobre este proyecto Blanca Lleó recuerda en su página web “…pusimos especial empeño en que todas las rejas de la cárcel fueran horizontales para permitir a los presos una visión de la línea del horizonte sobre los campos de olivos que estuviera libre de obstáculos…”. Para el sector privado Blanca Lleó diseñó el Complejo Turístico Tabaibas (1994-1995) en la isla de Lanzarote que destaca por una arquitectura discreta que se integra en el paisaje. El mismo cliente le encargaría un proyecto similar para Tenerife: Complejo Turístico Tabaibas II (2003).

Sin embargo, las obras más conocidas de Blanca Lleó son sus dos propuestas residenciales junto al estudio holandés MVRDV en el barrio de Sanchinarro de Madrid. La más mediática es el Edificio Mirador (2001-2005) que fue diseñado con el propósito de convertirse en el elemento que aporte identidad a esta zona de nuevo desarrollo urbanístico excesivamente homogéneo. En sus 21 plantas, el edificio alberga 36 tipologías distintas de vivienda, organizadas en 9 agrupaciones que quedan representadas por 9 tratamientos de fachada diferentes aportando dinamismo y carácter al conjunto. La diversidad de fachadas y la heterogeneidad en los huecos son un reflejo de la apuesta arquitectónica por una oferta residencial “razonablemente variada” que se adapte a los nuevos modos de habitar y a las necesidades cambiantes de los usuarios. En este sentido, las diferentes tipologías aglutinan las instalaciones y la estructura en el perímetro, permitiendo viviendas flexibles y adaptables. La gran terraza-mirador situada en la planta 12 funciona como “patio vecinal” para el encuentro, y es también uno de los elementos más mediáticos, incluso polémicos, del edificio. Aunque menos mediático, el Edificio Celosía (2001-2008) es también una obra de gran interés, resultado de una reflexión en torno a la vivienda. Se propone una manzana perforada, como resultado de combinar lo positivo de la manzana cerrada decimonónica y el bloque moderno. El edificio es permeable gracias a los huecos de doble altura y permite espacios exteriores para ubicar algunas circulaciones, promover el encuentro entre vecinos y fomentar la comunicación y el control visual entre el edificio y la calle. Ambos edificios en el barrio de Sanchinarro fueron promovidos por la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo (EMVS) del Ayuntamiento de Madrid con el objetivo de aportar a la vivienda social de promoción pública la máxima calidad en el diseño, así como la colaboración entre estudios de arquitectura nocionales y extranjeros para el intercambio de ideas y experiencias sobre la vivienda social.

En Barcelona, Blanca Lleó es también autora del Edificio Mare de Deu (2005-2006) que alberga 97 viviendas en alquiler para jóvenes. Se trata de un proyecto experimental en un sentido amplio, no sólo las tipologías son innovadoras desde el mismo concepto, sino que el propio sistema constructivo, el diseño de las instalaciones y la solución de fachada están pensados para una mayor sostenibilidad (económica y ambiental) y eficiencia del edificio.

Efectivamente, Blanca Lleó es una arquitecta que ha reflexionado sobre el uso residencial de la arquitectura. Su tesis La casa, sueño de habitar en el proyecto moderno, un proyecto inacabado (1996) dirigida por Manuel de las Casas y tutorizada por Francisco Javier Sáenz de Oíza ya aborda este tema. Por su investigación obtuvo el Premio Extraordinario de Tesis Doctoral de la Universidad Politécnica de Madrid en 1996 y un año más tarde el Primer Premio del Concurso de Tesis Doctorales de Arquitectura organizado por la Fundación Caja de Arquitectos. En el año 2005 la Editorial Gustavo Gili publicó una adaptación de su tesis doctoral bajo el título El sueño de habitar, que se ha convertido en un clásico de obligada lectura sobre la vivienda.

Además de la investigación y los proyectos en torno al uso residencial, por los que Blanca Lleó es especialmente conocida, la trayectoria de esta arquitecta abarca proyectos muy diversos, desde el diseño de exposiciones hasta el desarrollo de soluciones constructivas, pasando por distintas intervenciones de diseño urbano. En 1999 diseñó y fue la comisaria (junto a Rafael Bescós) de la exposición Ignazio Gardella 1905-1999, Arquitectura a través de un Siglo, organizada por el Ministerio de Fomento en Madrid. En 2013 fue la responsable de la exposición El Amor y el Éxtasis de la fotógrafa Isabel Muñoz en Madrid. Junto con la compañía eléctrica Endesa ha desarrollado la Lama Girasol (2013) que integra la captación de energía solar en la misma fachada de los edificios. Recientemente ha desarrollado distintas intervenciones de remodelación de espacios y entornos urbanos como la Reordenación Urbana de la Plaza de San Román en Toledo (2014) o la remodelación de espacios para servicios de hostelería en el Edificio Sabatini del Museo Reina Sofía de Madrid (2013-2014).

Blanca Lleó siempre ha querido compaginar la docencia con la actividad profesional, campos que considera complementarios. Es una de las dos únicas catedráticas de la Escuela de Arquitectura de Madrid, donde tiene su propia unidad docente que le permite “independencia en la forma de enseñar”. Ha sido profesora invitada en Estados Unidos (Rhode Island School of Design, Cranbrook Academy of Art, Princeton University, entre otras) y Reino Unido (Cambridge University). También imparte seminarios y conferencias tanto dentro como fuera de España (Harvard, Columbia, Tokio, Seúl, Hong Kong, Singapur, Copenhague, Frankfurt, Venecia, Santiago de Chile, Porto Alegre, Buenos Aires, La Habana, entre muchas otras).

La obra de esta arquitecta ha sido expuesta en foros nacionales e internacionales, así como publicada en numerosos libros y revistas especializadas. Cabe destacar que Blanca Lleó es la única mujer con firma propia del conjunto de estudios de arquitectura españoles que formaron parte de la prestigiosa exposición On Site: New Architecture in Spain, comisariada por Terence Riley para el MoMA de Nueva York en 2006.

Ha resultado premiada por el Ayuntamiento de Madrid, la Bienal de Arquitectura Española y Endesa, ha sido finalista de los premios FAD y su obra ha estado seleccionada para los Premios Mies van der Rohe. Blanca Lleó es patrona del Museo Nacional de Arquitectura de España y de la Fundación Alejandro de la Sota; es miembro del Consejo de la Caja de Arquitectos, de la Comisión de Calidad del Ayuntamiento de Barcelona y del Comité Científico de Europan. Es también experta independiente del Premio Mies van der Rohe de arquitectura.

BIBLIOBUS

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FARO DE NULES

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AYUNTAMIENTO DE LORCA

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CENTRO PENITENCIARIO DE JAÉN

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EDIFICIO MIRADOR MVRDV

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EDIFICIO MARE DE DEU

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*El texto de este artículo ha sido extraído del blog Un dia Una Arquitecta con carácter divulgativo, si te apetece compartirlo en cualquier otro medio, estaremos encantados de que lo hagas siempre que cites la fuente inicial del mismo y si quieres la de este sitio. También te animamos a seguir en las RRSS a @UNDIAUNAARQ por la inestimable labor que realizan en la difusión de la profesión realizada por mujeres.

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